Una receta ideal para conseguir que los niños coman verduras, bien disimuladas... o en mi caso, que mi pareja coma calabacín. ¡Está simplemente riquísima! (Siento que la foto sea tan borrosa... ¡No me di cuenta hasta después de habérmelo comido!)

Pasta con atún y salsa de tomate, calabacín y cebolla

Ingredientes

• 200g pasta al gusto.
• 1 lata de atún en aceite vegetal.
• 350g de tomate frito casero.
• 1/2 calabacín verde.
• 1/2 cebolla grande.
• Aceite de oliva.
• Sal.
• Pimienta.
• Orégano.

Preparación

1. Pica la cebolla finamente y trocea el calabacín bien lavado en cubitos.
2. Pon un chorrito pequeño de aceite de oliva en una sartén y añade primero la cebolla. Añade un poco de sal y spera unos minutos hasta que empiece a transparentar. Deja que se tueste ligeramente. 
3. Después agrega el calabacín y cocina hasta que esté blandito. A mí me gusta añadir un buen chorro de agua a mitad del cocinado para que se cueza un poco y quede bien blandito, pero para esta receta no es indispensable.
4. Añade un poco del tomate frito y mezcla, agrega pimienta al gusto.
5. Vierte la mezcla anterior en un vaso de trituradora y tritúralo perfectamente. Cuando desaparezcan los grumos, añade el resto del tomate, mezcla bien,  y corrige de sal si es necesario. Es posible que se vean puntitos verdes por la piel del calabacín, si no quieres que esto pase, pélalo antes de trocearlo.
6. Cuece la pasta según las instrucciones del fabricante. Después escúrrela y devuélvela a la olla. Añade la salsa por encima y mezcla bien.
7. Sirve la pasta en un plato, con media latita de atún desmenuzado por encima y acompaña con un poco de orégano seco.
8. ¡Buen provecho!